El inicio de una nueva vida

Hola soy Enrique. Os cuento. He comenzado una nueva vida. He puesto la casa en venta, he hecho las maletas y estoy esperando a que llegue María. Ella se lo dijo anoche a su marido. Nos vamos a ir a vivir a Cádiz, vamos a empezar de cero los dos juntos. Voy a echar mucho de menos a Fran, aunque sé que Araceli le va a cuidar bien. Igual que mi hermano, que cuidará bien de mi padre, que también le voy a echar de menos. Y aunque parezca mentira, también a este edificio. Antonio se quería despedir con un beso, pero le he dicho que no. ¡Ya ha venido María! Gracias a todos los que habéis estado ahí alguna vez. Adiós.

La visita de Araceli

Hola soy Enrique. Os cuento. Hoy por la tarde he recibido una visita esperada, la de Araceli. Ahora ella vive en Valencia con su hermano. La llamé por el tema de Fran. Al principio no me quería escuchar pero después pudo ver en mis ojos el amor que sentía por María. Al verlo Araceli me dijo que ella se haría cargo de Fran. Los dos nos abrazamos después. Por la noche, Fran se ha ido a Valencia a vivir. Mañana por la mañana María y yo nos fugamos. Mañana comienza una nueva etapa en mi vida. Mañana os cuento. Adiós.

Enrique habla con Fran y Julián

Hola soy Enrique. Os cuento. Son casi las dos de la madrugada, ahora hemos terminado de hablar. He estado toda la noche hablando con Fran y con mi padre, sobre María. Los dos se han quedado helados con que me quiera fugar con ella y dejarlo todo. He estado hablando con mi hermano y ha decidido hacerse cargo de mi padre, sobre todo ahora que Nines es su novia y se ha mudado a su casa. ¡Qué fuerte! El problema que me queda es Fran. El me ha dicho que se quiere quedar solo, pero no es posible, ya que la casa la dejaría en venta. Por ello me he armado de valor y he llamado a Araceli. Mañana viene a hablar conmigo. Mañana os cuento. Adiós.

Enrique y María se vuelven a besar

Hola soy Enrique. Os cuento. Ya es por la tarde. He ido al lugar donde María me dijo que quería quedar conmigo, un parque algo apartado del centro de la ciudad. Cuando la he visto me quería ir, ya que he vuelto a sufrir al pensar que jamás podría estar con ella. En cuanto ha llegado me he besado, nos hemos besado. No entendía nada. Nos hemos sentado y me ha dicho que está enamorada de mí y que está dispuesta a dejarlo todo por estar conmigo. Yo le he dicho lo mismo. Hemos decidido fugarnos pero después me he acordado de algo: Fran y mi padre. ¿Qué voy a hacer con ellos?...

Enrique se declara

Hola soy Enrique. Os cuento. Esto es lo que ha pasado. El otro día decidí declararme a María, la chica con la que tuve la confusión por la agencia matrimonial. Finalmente ha sido hoy por la mañana cuando he ido a su casa y me he declarado. Lo he hecho y justamente ha llegado en un coche alguien: su marido. El marido la ha metido en su casa mientras ella me miraba. Me he quedado destrozado, está casada. Supongo que esto es el fin de una posible relación que podría haber tenido con ella... ¡Un mensaje! ¡Es de ella! ¡Quiere que nos veamos a solas!....

Una sensación extraña

Hola soy Enrique. Os cuento. Tengo una sensación extraña. Ayer encontré la casa de la joven que se pensó que cobraba el acostarme con ella. Cuando me abrió la puerta me quedé helado, ya que la vi de nuevo tan sencilla y me quedé pasmado. Le devolví el dinero y ella lo cogió corriendo y se metió en la casa. No puedo dejar de pensar en ella, creo, creo.... ¡creo que me he enamorado! Tiene sólo 27 años pero me he enamorado de ella. ¿Sentirá ella lo mismo por mí? Lo mejor será saberlo cuanto antes. Voy a ir de nuevo a su casa y me voy a declarar. Mañana os cuento. Adiós.

En busca de la joven

Hola soy Enrique. Os cuento. Aún estoy avergonzado. Mira que apuntarme sin darme cuenta a una agencia de gigolós. Esa chica se pensó que yo era gigoló y por eso me pagó después de acostarse conmigo. Como ha sido un malentendido, me he puesto a buscarla para devolverle el dinero. No tengo muchos datos sobre ella, ya que en la agencia no me han dado mucha información después de desapuntarme. En el ayuntamiento he mirado en el registro civil y he encontrado su dirección. Lo mejor será ir a su casa y devolverle el dinero. Mañana os cuento. Adiós.